Ejercer la razón con compasión
Con mucha regularidad hay personas que me preguntan ¿porqué mi insistencia en la no-violencia como forma de lucha contra la dictadura? Otras preguntas muy comunes se refieren a mi decisión de hablarle siempre con respeto a los fanáticos del régimen, incluyendo a policías. Creo en la dignidad intrínseca de toda persona humana pero a la vez comprendo lo difícil que es mantener un tono moderado frente a personas violentas y fanatizadas. Hay sido demasiada la perversidad del régimen, y por eso el enojo y la indignación es una reacción humana y natural.
A pesar de ello, considero importante hacer un esfuerzo por mantener altura en el debate y esforzarnos para nuestro corazón—aún con todas las heridas—no se lene de odio y no perdamos la capacidad de sentir compasión.
Quizás por eso el régimen se ha empecinado en fabricar mentiras en contra de todos aquellos que hemos optado por el camino de la no-violencia. El régimen nos han ridiculizado y calumniado (al punto que hasta más de algún “azul y blanco” ha terminando creyendo alguna de esas mentiras). El régimen lo hace para provocarnos y llevarnos a su territorio, que es la violencia física y verbal. Hagamos todo lo posible por no caer en provocaciones.
Por su lado, los seguidores de Ortega-Murillo hablan [falsamente] de paz, pero a la vez recetan “PLOMO”, odio y violencia. Para muestra un botón: En mi perfil de Facebook publiqué una pequeña muestra de las amenazas de muerte que recibí ayer (25 de diciembre) de parte fanáticos del FSLN. Al igual que tantas personas que no pensamos como ellos, ese es nuestro pan de cada día. Aún así, no podemos perder el enfoque de no-violencia.
Toda violencia tiene sus raíces en el miedo. Por eso, régimen y sus seguidores tienen miedo a perder el poder que sólo saben sostener con represión. Nuestro obligación es seguir hablando con sinceridad y humildad sobre el país que queremos construir para mejorar la vida de todas las personas nicaragüenses, sin NINGUNA excepción.
La verdad se debe decir con caridad y la razón, con compasión. Un nuevo país está por nacer. Esa es mi convicción.
A pesar de ello, considero importante hacer un esfuerzo por mantener altura en el debate y esforzarnos para nuestro corazón—aún con todas las heridas—no se lene de odio y no perdamos la capacidad de sentir compasión.
Quizás por eso el régimen se ha empecinado en fabricar mentiras en contra de todos aquellos que hemos optado por el camino de la no-violencia. El régimen nos han ridiculizado y calumniado (al punto que hasta más de algún “azul y blanco” ha terminando creyendo alguna de esas mentiras). El régimen lo hace para provocarnos y llevarnos a su territorio, que es la violencia física y verbal. Hagamos todo lo posible por no caer en provocaciones.
Por su lado, los seguidores de Ortega-Murillo hablan [falsamente] de paz, pero a la vez recetan “PLOMO”, odio y violencia. Para muestra un botón: En mi perfil de Facebook publiqué una pequeña muestra de las amenazas de muerte que recibí ayer (25 de diciembre) de parte fanáticos del FSLN. Al igual que tantas personas que no pensamos como ellos, ese es nuestro pan de cada día. Aún así, no podemos perder el enfoque de no-violencia.
Toda violencia tiene sus raíces en el miedo. Por eso, régimen y sus seguidores tienen miedo a perder el poder que sólo saben sostener con represión. Nuestro obligación es seguir hablando con sinceridad y humildad sobre el país que queremos construir para mejorar la vida de todas las personas nicaragüenses, sin NINGUNA excepción.
La verdad se debe decir con caridad y la razón, con compasión. Un nuevo país está por nacer. Esa es mi convicción.
Comentarios
"Ejercer la Razón con compasión" lleva a cierto grado de utopía extrema en lo que es el contexto político nicaragüense, y aún más con la mafia que gira en torno al clan Orteguista. La razón con compasión, fue el resultado del asesinato del Dr. Pedro Joaquín Chamorro Cardenal. Y fuera del contexto nacional con el Obispo Arnulfo Romero en San Salvador. La razón con compasión, estriba en lo límites de quiénes no han sido mutilados en todos sus extremos (se la forma que sea), por los sicarios a sueldos, o la aplanadora del Orteguismo (En S.XX, y S.XXI); y que en la ventana que este método racional les brinda, se aprovechan de este para exterminio y control político de quiénes al unísono claman por cambios "El Pueblo".
La pregunta obligada: ¿Ejercer la Razón con Compasión, será igual para quienes han visto asesinados a sus seres amados, por los sicarios del régimen?. ¿Pensarán lo mismo las familias sobrevivientes del Barrio Carlos Marx? ¿Alvarito Conrado?, ¿y todos aquéllos que vieron morir a sus hijos en los años 80 con el Servicio Militar Obligatorio, o asesinados en Abril 19, o huyendo al exilio en forma masiva?.
Quiénes realizan los grandes negocios a expensa de la sangre del pueblo, en contubernio con la Dictadura o en el "juego de la negociación", probablemente piensen con Compasión (sin aludirlo a usted) respecto a sus grandes intereses económicos o políticos, pero la moneda siempre tiene dos caras, y dependerá de quien la tenga en la mano al momento de lanzarla al juego.