"El camino del sabio no es el camino de los astutos."
"El camino del sabio no es el camino de los astutos." (San Marcos, Carazo, febrero de 1996) La simplicidad y la rectitud como una forma voluntaria de vida, es un camino interesante (y a la vez complejo), a la paz interior. En cada paso, los ruidos del mundo con su estridencia consumista se esmeran por distraernos. Tampoco faltan los curiosos espectadores. Unos esperan que nos tropecemos y caigamos en los hábitos y los rituales del materialismo y el comportamiento tradicional de exaltar a los ídolos de barro en sus distintas formas: el dios-mercado, el dios-poder, el dios-placer, el dios-estatus. Pero hay otros que observan con inocencia la aventura de los atrevidos que se han lanzado al camino sin mapas, sin seguros, y sin garantías. Aquellos que andan sin más brújula que el amor. Es cierto que nadie debería iniciar una jornada en función de ninguna audiencia externa más que la voz de la propia conciencia. Sin embargo, sería irresponsable creer que nuestras acciones no...